Llevar bra o no llevarlo, he ahí el dilema (de la cuarentena)

Justo unas horas antes de empezar a escribir este post leí un tuit que decía “Say yes to masks and no to bras”, lo que podría traducirse como “Dile que sí a las mascarillas y no a los brasieres”. “Mascarilla” y “bra” (brasier o sostén) son dos palabras que he escuchado mucho durante la cuarentena, y por razones muy diferentes. La primera es un accesorio de protección indispensable y sin el cual no deberías ir a ninguna parte; mientras que la segunda está “de vacaciones” porque muchas mujeres han optado por liberar sus boobies y dejar de usarla.

Durante estos meses he leído muchos comentarios a favor de no llevar bra en casa, pero también uno que otro en contra. Como la mayoría provienen de internet y de gente a la que probablemente jamás he visto en la vida, decidí acudir a una fuente que conozco bien: mis mejores amigas del colegio. Sí, ellas, quienes llegaron a mi vida cuando yo todavía usaba top de entrenamiento para niñas, jaja. La pregunta que les lancé fue: “¿Llevan bra mientras están en casa?”

“Honestamente yo solo uso (bra) si salgo. En mi casa uso unos tipo top que son mucho más cómodos”. Maribel.

“Pues yo sigo usándolo porque hay más gente en mi casa y porque tengo que dar clases virtuales. Creo que si no fuera así, no usaría, aunque también depende de la ropa que me ponga”. Tatiana.

“La verdad yo cuando estoy en mi casa, no uso. Se siente uno más libre y relajada. Circula más la sangre y el oxigeno (risas)”. Dalila.

“Yo sí uso, pero la verdad uso como los más viejitos. Como que los siento más cómodos”. Ana Karen.

¿Y yo? Pues antes de revelárselos, paso a recordarles que es solo mi opinión, y que para nada soy experta. El bra ha tenido sus defensores y detractores toda la vida, sin embargo creo que es importante señalar que muchos concuerdan en que debería utilizarse solo durante 6 u 8 horas al día. Algunos estudios incluso dicen que liberarse totalmente de él hace que las boobies se fortalezcan.

En lo personal, tengo que decir que mientras he estado en casa, he renunciado a los bra “más elaborados”. Es decir, aquellos que son de realce (o push up) y a los bustier. En su lugar, opté por usar otros más básicos y cómodos, como el bralette. Por alguna razón (y mira que lo he intentado en repetidas ocasiones) no me siento “bien” paseando por mi sala o mi improvisada oficina “sin nada” arriba.

Realmente no sé bien de lo que se trate. Tal vez sea un asunto de autoconfianza que aún deba trabajar, o tal vez sea mi temor tercermundista de tener que salir a la calle intempestivamente en caso de un temblor u otro desastre natural. En fin que para aquellas que son como yo, dejo tres opciones:

Bralette

Los bralette son lo máximo, porque combinan elementos de un bra tradicional con la forma del top deportivo. Es decir, son sexys y de materiales como encaje, pero no tienen varillas, ni rellenos, ni nada que nos haría sentir incómodas en casa.

Top

Al igual que los bralette, los top no tienen varillas, aunque algunos sí poseen rellenos o almohadillas removibles. Son livianos y frescos, y por eso son una gran opción para usar durante el confinamiento.

Bra básico

Cada vez hay bras más bellos y elaborados, pero de vez en cuando está bien volver a los básicos. Estos solo tienen las varillas regulares y encaje o algodón, por lo que ayudan a centrar y recoger el busto.

Y ustedes ¿son del bra team o del no bra team?

Look: Bra básico de Leonisa y joggers de Athletic Works.

Fotos: Mariano Macz